
Vayamos a lo pedestre.
Un día nos quedamos mirando a un archipámpano que muestra el vacío de su chistera y va el tío y saca un conejete de su interior. Aunque la razón, desde una habitación oscura, nos dice "tate"; la ilusión, desde el centro del pecho nos grita "magia".
Con los garbanzos ocurre algo muy parecido. De repente un pollo simpatiquísimo nos habla de tal "cocidito de rechupete" y se inventa, el muy tuno, que tiene "nosecuantos vuelcos"; se pone sublime el colega y explica el ritual de la correcta degustación de esa pléyade de "vuelcos" que componen el cocido.
La ilusión nos dice "magia", pero la razón, desde la alcoba en la que se halla recluída, grita "¿pero qué come este petimetre en su casa?"
Nota homeopática:
ResponderEliminarDicen que el garbanzo es la legumbre del "buen rollito", que mejora el humor y hace reír. Será, digo yo, cuando su más que demostrado efecto aerofágico se manifieste de forma silenciosa en lugares de escasa o nula ventilación.