Tras el archivo de la causa penal en su contra y para levantar él solo la lápida del Generalísimo
Fuentes cercanas al políglota conseller Alejandro Font de Mora, manifestaron a este medio que en cuanto Francisco Camps Ortiz supo que su amiguito Juan Luis de la Rúa le había salvado del banquillo, prometió peregrinar a Cuelgamuros [Basílica Menor de la Santa Cruz del Valle de los Caídos] para ofrecerse a levantar de nuevo, con sus solas manos, la lápida que protege los beatíficos restos del Generalísimo. Grúas Pernales por su parte ya ha manifestado que volverá a poner a disposición de la Fundación Francisco Franco cuantos medios sean necesarios en vista, desde luego, del menguado fuste muscular del señor Camps y para que no se malogre ninguno de sus trajes.
La juez que debería llevar el asunto de la exhumación hace la vista gorda
María Incorruptible del Ponderado Temple, juez impecable a quien se debería haber dirigido cualquier solicitud de exhumación, ha cambiado, coincidiendo con el estreno de su nuevo Mercedes B200, su inflexible criterio procedimental y ha decidido, según una funcionaria que está de baja por lumbalgia, permanecer ciega a cuantas operaciones se realicen en el Valle de los Caídos [Basílica Menor de la Santa Cruz del Valle de los Caídos] tendentes a obtener las preciadas muestras de ADN, cosa que deja el camino expedito a Francisco Camps Ortiz para que, una vez finalizado el campeonato de Fómula 1 de Valencia, inicie su pía peregrinación.
Por otro lado, la salud del doctor Lügenhaft no mejora
Así es la cosa, el genetista eximio ha sido trasladado desde la clínica Rúber de Madrid a la Heidisklinic de Berna en Suiza donde se espera que recupere, gracias al sano aire alpino, ese porte germano y ese lustre que traía cuando llegó a España y que no termina de recobrar.
La aguerrida peregrinación de Francisco Camps Ortiz está, pues, pendiente del estado de salud de Lügenhaft.
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